La lista de mis deseos, de Grégoire Delacourt

La lista de mis deseos

Grégoire Delacourt

ISBN: 978-84-15532-55-2

Formato: Rustica con solapas– 160 Pág.

Editorial: Maeva

La protagonista de esta historia es Jocelyne, apodada Jo, que regenta su propia mercería en Arras, una pequeña ciudad francesa, y escribe un blog sobre costura y manualidades, diezdedosdeoro, que cuenta ya con miles de seguidores. Sus mejores amigas son las gemelas propietarias del salón de belleza vecino. Su marido, Jocelyn, también Jo, es de lo más normalito, y sus dos hijos ya no viven en casa. En este punto de su vida no puede evitar sentir cierta nostalgia al pensar en sus ya caducas ilusiones de juventud, cuando soñaba con ser modista en París.

Cuando las gemelas la convencen para que juegue al Euromillón, se encuentra, de repente, con dieciocho millones de euros en las manos, y la posibilidad de tener todo lo que quiera. En ese momento es cuando Jo decide empezar a escribir una lista enumerando todos sus deseos, desde una lámpara para la mesa de la entrada hasta una nueva cortina para la ducha; porque, para su propia sorpresa, ya no está del todo segura de si el dinero realmente trae la felicidad…

 

 

Si os digo la verdad, apenas tenía la intención de leer este libro. Ya había leído algunas reseñas, que había pasado un poco por alto porque realmente estaba tan saturada que apenas podía plantearme añadir nuevas lecturas. Pero en entero de este año me plantee una nueva visión de mi organización y entre todos mis propósitos puse el leerme los libros que me apetecieran cuando me apetecieran. La forma más sencilla es programar por lo bajo y dejar un buen margen a final de mes para colocar lo que me quisiera.

 

Pero aun así, tampoco hubiera estado en mi lista. Hasta que un día, curioseando en la red (Youtube y Pinterest son los mayores cometiempos que existen) llegué al resumen lector de Lectora de tot. Y me vi el video. Y me apunte un par de títulos. Porque es imposible no hacerlo cuando ella te habla con ese entusiasmo de sus lecturas. Claro que el hecho de que cogiera este fue básicamente lo corto que era. Así, si no me entusiasmaba tanto, al menos habría perdido muy poco tiempo.

 

Evidentemente no fue una mañana perdida, el tiempo que me llevó terminarlo. De hecho, me encontré con una lectura fresca y a la vez cargada de reflexión. Y con un argumento de lo más interesante: una mujer cualquiera con una vida normal a la que le tocan 18 millones en la lotería. ¿Qué hace? Listas y listas de lo que le gustaría comprarse o le gustaría hacer. Y entre tanto, repasa su vida.

 

Porque sinceramente, su vida no era como ella siempre había pensado: no ha llegado a hacer lo que hubiera querido, ni su matrimonio ha resultado ser como esperaba ni su negocio (que no había planeado en ningún momento) va bien del todo. Pero ha ido haciéndose un camino: creando un blog de costura que tiene muy buena aceptación, cosechando amistades, sabiendo ver las cosas buenas que tiene su marido…

 

Y cuando por fin tiene todo ese dinero para gastar, se da cuenta de que no sabe en qué, ni como. Y que todo va a cambiar y no sabe si quiere que cambie realmente. Porque en el fondo, todo lo que le hace feliz, es algo que se ha labrado ella sola sin hacerle falta el dinero.

 

A pesar de que creáis que os he contado mucho, eso apenas son los comienzos de la novela. Porque la parte negativa termina llegando como en todo, y más pronto que tarde. Y hay cosas que no están planeadas en ninguna lista, porque en ningún momento las deseamos.

 

El personaje de Jocelyne me ha parecido muy entrañable, a pesar de lo tristón que puede resultar. Pero es ese realismo lo que le da la fuerza a la imagen, y esa forma expresarse que hace creer en las personas. Porque a pesar de que ella no pude terminar de estudiar al morir su padre, tiene una mayor sabiduría de vida que mucha gente y eso me ha encantado.

 

Por lo que he podido ver, la mayoría de la gente ve a su marido como un hombre normalísimo pero un poco bruto. No sé si habré sido la única, pero a mí me da la imagen de maltratador en potencia: por como habla, por las cosas que hace… Es un personaje que me ha desagradado muchísimo, y más aun teniendo en cuenta como habla ella de él, con ternura, pero luego te cuenta cosas horribles. Lo dicho: tiene el perfil.

 

Y para que todo no sea tan triste, nos da a conocer a los personajes de las gemelas que regentan el salón de belleza, donde introduce el toque de humor y color. Además, también he apreciado el detalle de que la protagonista se apoyara en su blog para intentar salir del hoyo, muy real y muy a la orden del día. Me he sentido totalmente identificada con la alegría de tener lectores y el cariño recibido.

 

El estilo es sencillo, pero a la vez muy lirico y que te lleva a muchas reflexiones, sacándonos de una lectura que podría haber sido plana. ¿Realmente el dinero puede darnos la felicidad? ¿Cómo afectará eso a la gente que nos rodea? Yo siempre lo he dicho, que no me gustaría que me tocaran esas cifras inhumanas. Porque aunque digas lo contrario, ya no puedes seguir haciendo tu vida. Y por comprendo a Jo.

 

Sin embargo, si tengo que ponerle un pero a esta novela, es el final. Que no está mal del todo, pero no estoy de acuerdo con que para salir de un bache tenga que refugiarse en lo que se fue a refugiar (y los que habéis leído la novela sabréis a que me refiero). Me suele suceder a menudo con muchas novelas, en las que me encuentro con un personaje femenino que encuentra la plenitud basada en eso. ¿Acaso esa situación es obligatoria para que una mujer esté bien? Yo discrepo.

 

Comportamientos humanos aparte, La lista de mis deseos es una novela original que he disfrutado desde la primera página. Que a la vez que nos ofrece una historia ligera, también nos lleva a reflexiones. Y que nos muestra situaciones donde podríamos ser cualquiera de nosotros los protagonistas. Yo por mi parte, espero no tener que saberlo nunca. Porque la lista de mis deseos en estos momentos (aparte de unas ruedas nuevas para el coche y una revisión del aceite que me urge) no son en absoluto materiales.