El
buda riente
David
G. Lanoue
ISBN:
978-84-942380-4-8
Formato:
Rustica con solapas– 208 Págs
Editorial:
Funambulista
En esta original y
divertidísima novela, el narrador (trasunto del autor), un profesor
universitario apasionado del haiku —la poesía escrita con un solo aliento—, se
siente atormentado porque, tras años de incansable escritura, una noche de
eclipse lunar se queda de repente sin inspiración, cosa que le había ocurrido unos
siglos antes al poeta japonés Dientes Salientes. ¿Qué le estaba sucediendo?,
¿qué le había sucedido al prolífico Dientes Salientes para, después del
eclipse, no haber vuelto a escribir durante tanto tiempo? Para resolver estos
misterios y gracias a la única ayuda de su precioso bolígrafo, el narrador,
disfrazado de monje budista —pero sin abandonar sus cómodas deportivas Reebok—,
emprende un viaje en el espacio y en el tiempo desde la actual Nueva Orleans al
Japón Antiguo de Dientes Salientes, un lugar poblado de samuráis, geishas,
críticos literarios ninjas y extravagantes poetas.
Desde
hace ya algún tiempo me fascina la cultura japonesa. No solo su literatura, que
cae en mis manos unas tres o cuatro veces al año (tampoco hay que saturar). Las
costumbres, la gastronomía, los paisajes,… Todo es tan diferente y con un aroma
tan ancestral que no puedo resistirme una y otra vez a leer, ver o degustar su
cultura. Pero si literariamente hay algo que caracteriza al pueblo nipón, es su
haiku.
El
haiku es ese pequeño poema escrito en un suspiro de asombro frente a la observación
del entorno. Lo que puede sonar muy intimista y sencillo, entraña una técnica ancestral
con unos requisitos formales estrictos (17 silabas o moras, en tres versos de 5-7-5 respectivamente, y sin rima) y es
precisamente esto lo que lo hace tan difícil de reproducir en otros idiomas.
Sin duda, el haiku es un arte que seduce a muchos millones de personas en el
mundo.
Lo
que es evidente es que David G. Lanoue es un enamorado del haiku y eso se
transmite en su carrera profesional. A pesar de ser profesor de literatura
inglesa, ha escrito numerosos ensayos y traducciones de estos poemas, y en su
primera novela titulada Loco por el haiku
lo demostraba. Y no la he leído, por si os lo preguntabais, pero en El buda riente hace menciones a ella, y
con eso ya me da pistas.
Sin
embargo, no penséis que El buda riente
es una novela de erudición, porque no puede estar más lejos de eso. Aquí nos
presenta una historia muy simpática donde refleja sus pasiones: el haiku y la
cultura japonesa antigua. El narrador es una autor americano afincado en Nueva
Orleans que se siente fascinado por la técnica del poema japonés, especialmente
por el poeta Dientes Salientes. Por eso, siguiendo los pasos del diario que ha
pasado a la historia, se planta frente a un eclipse lunar que le produce el
temido bloqueo del escritor.
Puede
que no tenga nada que ver con este fenómeno, pero precisamente Dientes
Salientes había tenido el mismo problema en su tiempo. Cuatro meses de vacío en
su diario que no había manera de explicar. Cuando agota todas las vías de investigación
decide preguntárselo él mismo. ¿Cómo? Pues escribiendo una novela en la que se
coloca de protagonista como monje budista en la misma época en la que sucedió
todo.
Partiendo
de este axioma, ya podéis suponer que no va en serio. En realidad se trata de
una locura de novela que roza la metaliteratura y los viajes en el tiempo a
través de una hoja de papel. Donde el falso monje lleva bajo su túnica unas
zapatillas Rebook porque las sandalias son muy incomodas. Donde hay
peregrinajes y espías ninjas, ambientada en un Japón antiguo donde el honor y
las tradiciones pesan más que cualquier otra cosa.
Sin
embargo, no es una novela histórica de ninguna de las maneras. La atmosfera no
es pesada como cabe esperar de una cultura muy rígida, y el ritmo es
extremadamente fluido. Tanto, que se lee de una sentada sus apenas 200 páginas.
Los personajes por su parte son sencillos pero muy carismáticos y peculiares,
como todo en esta historia.
Las
páginas vuelan, la sonrisa se levanta, y cuando nos damos cuenta estamos
totalmente metidos en una historia bastante absurda pero muy simpática. Porque,
en serio, ¿Quién no ha querido meterse en un libro y poder interactuar los
personajes, preguntarles cosas, aclarar aspectos de sus vidas? Esto es lo que
creo que hace David G. Lanoue en El buda riente, un intento de reflejar
sus ganas de haber vivido una época que resulta fascinante. E intentar que nosotros
también lo hagamos.
A
pesar de que es una novela rara, me ha dejado muy buen sabor de boca. Y también
ganas de leer Loco por el haiku. Funambulista
siempre edita libros diferentes, y con este ha dado en el clavo. Si os
interesan los haikus, el Japón medieval y el género de metaliteratura, creo que
no podéis perderos esta historia tan curiosa. Os va a sorprender.
Por lo menos es diferente xD, pero por ahora no me animo....tengo varias novelas de literatura japonesa pendientes en casa.
ResponderEliminarUn beso!
Pinta bien aunque no es un tipo de libro que me apetezca en estos momentos :)
ResponderEliminarBs.
Las sorpresas son siempre de agradecer, así que me apunto este título.
ResponderEliminarSi me lo encuentro. NO me importaría leerlo.
ResponderEliminarA mi me gusta leer literatura japonesa, no siempre me gustan todos los libros que leo por igual, pero siempre me aportan algo, no me dejan indiferente.
ResponderEliminarBesos.
No conocía el libro pero creo que no es un tipo de planteamiento que disfrutaría así que lo dejo pasar
ResponderEliminarBesos
No conocía el libro. No va a ser de los que vaya corriendo a la librería por él, pero si me lo encuentro, se viene conmigo. Tiene buena pinta.
ResponderEliminarBesotes!!!
Parece interesante, me lo llevo apuntado, besotes
ResponderEliminarPues no conocía el libro pero de algún modo es una rareza, y las rarezas me atraen
ResponderEliminarBesos
Pues mira que de entrada no me llamaba, pero según he ido leyéndote... parece diferente y eso me gusta =)
ResponderEliminarBesotes
Lo estoy leyendo
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