Hanshichi:
un detective en el Japón de los samurais
Kido
Okamoto
ISBN:
9788494030130
Formato:
Tapa blanda– 336 Págs
Editorial:
Quaterni
Las historias del detective
Hanshichi, personaje inspirado en Sherlock Holmes, se desarrollan entre 1840 y
1860, una época en la que tradición y superstición van de la mano y son el
verdadero enemigo del racional y poco ortodoxo Hanshichi. Escrita con una sutil
ironía y gran sentido del humor, Okamoto Kidô consigue que el lector disfrute
con los casos del astuto inspector, trasladándolo a un período exótico incluso
para los japoneses. Una era plagada de aparecidos, de hechizos de zorros, de
criaturas kappa y de fantasmas. Misterios a los que el detective se enfrentará,
armado únicamente con su ingenio y sus hábiles e incisivos interrogatorios
A
pesar de que este año estoy teniendo una racha lectora muy buena (no solo en
cantidad, sino en calidad de las lecturas elegidas) a veces meto la pata a la
hora de escoger ciertos títulos. En este caso era una obra situada en Japón y
esta recopilación de relatos era más que evidente. Por curiosidad acabó
ganándole el puesto a La devoción del sospechoso X, la otra alternativa que me
había planteado. Justo esta mañana leía la
reseña de No solo leo y me arrepentí un poco de no haberlo hecho al
revés.
A
mí la cultura asiática es algo que me fascina en todos su ámbitos, desde la
cocina hasta las costumbre diarias. Especialmente Japón es un país que me atrae
mucho quizás porque tanto la geografía como la historia les han hecho una
sociedad muy diferente a lo que estamos acostumbrados ¿Habéis leído alguna vez
a cerca del sistema de recogida de basuras que tienen en Tokio? ¿O la
estructura de las plantas depuradoras? Cuestiones diarias tan internacionales
resultan muy distintas y llamativas en cuanto a como lo hacen los nipones.
Os
llame la atención o no Japón, es innegable que la época Edo es algo mágico: los
samuráis, la estética, la educación y las formas sociales van más allá del
feudalismo como lo conocimos en Europa. No soy una experta en el tema pero si
puedo, siempre leo algo más sobre ello. Quizás ese fue uno de los motivos que
me hicieron decantarme por Hanshichi. No podía resistirme a relatos policiacos
situados en este periodo.
Al
empezar este libro me he encontrado con una recopilación de pequeñas historias
de distintos casos de este detective. En un principio no siguen ningún orden
cronológico, ya que se presentan todo como una narración de anécdotas casuales
que surgen a raíz de conversaciones con el protagonista, aunque la voz del
narrador principal no sea la suya exactamente.
Son
en total diez casos independientes que aportan mucho en cuanto al conocimiento
de las tradiciones de la época, la sociedad y las supersticiones. Cuestiones
como el trabajo policial o el papel de la mujer son temas interesantes que se
ven reflejado en sus páginas. Ahí está donde se encuentra el mejor punto de
Hanshichi.
Porque
en cuanto a lo referente al género policiaco (ni me voy a arriesgar a llamarlo
negro) se queda un poco flojo. Creo que hubo un fallo “promocional” al llamarlo
el Sherlock Holmes japonés, porque el hecho de que su autor haya leído a Conan
Doyle no significa que quisiera reproducir el personaje. Y es que en realidad la
capacidad deductiva de este detective es bastante limitada y los datos clave
para resolver el misterio se ocultan totalmente al lector hasta el momento
final en que se explica. De esta manera me ha restado el atractivo principal de
estas historias: jugar a ser yo misma quien lo resuelva.
La
dinámica es prácticamente la misma en todas las historias, así que una vez
llegado al punto es que supe que no iba a poder adelantarme a la narración decidí
directamente disfrutar de la cultura nipona que me exponían. El estilo es muy
correcto, muy formal pero al mismo tiempo sencillo de leer. Y si te cansas tras
unos cuantos casos siempre puedes dejarlo descansar para volver dentro de un
par de noches.
Eso
sí, la edición de Quaterni es espectacular ya no solo en la calidad física de
la misma sino en la dedicación y las notas a pie de página que aclaran
cualquier detalle que sea de interés.
En
definitiva, es una obra que aporta mucho a nivel de cultura japonesa pero no
tanto como historia de detectives. Ahora bien, dependiendo de que os interesa
más decidid vosotros si os merece la pena leerla o no.
Reseña
para la Yincana Criminal: Sucedió en África, Asia y Oceanía – La acción
transcurre en Japón o el escritor/a es japonés.
Hay que ver lo que ha dado de sí Holmes. No me importaría leerlo pero más por el aspecto de la cultura nipona que por la trama detectivesca.
ResponderEliminarPues me gusta saber de la cultura japonesa, así que por este lado sí que me interesa este libro.
ResponderEliminarBesotes!!!