¡Buenas a
todos!
Y para
cerrar definitivamente la tanda de retos, tras mucho dudar, me voy a apuntar
nuevamente a esta proposición de Carmina. El año pasado me sirvió de bastante y
lo cumplí en diciembre, aunque forzando mucho los dos últimos meses, en los que
tuve que meter a calzador cerca de 6 libros. Con lo que me ha sido imposible
cumplir es con las reseñas….
La cosa
consiste, si se hace bien, en leer una vez al mes uno de esos libros que llevan
acumulando polvo en casa desde épocas inmemoriales. De esos que llamamos “pendientes”
pero que llevan más de un año en ese estado. De esta manera, a finales de año
limpiaste 12 títulos de la lista, y ya eres un poco más libre.
No sé si al
final se quedará en propósitos de año nuevo, pero yo por si acaso ya he puesto
uno de esos títulos en la programación de lecturas de enero… Aunque como ya he
ido empezándola, tal vez tenga que rehacerla.
¿Qué me decís?
¿Os animáis?