Donde enterré a Fabiana Orquera, de Cristian Perfumo

 

Donde enterré a Fabiana Orquera

Cristian Perfumo

ASIN: B00HS0H49A

Formato: Digital– 282 Pág.

Editorial: Autopublicado

Verano de 1983:

En una casa de campo de la Patagonia, a quince kilómetros del vecino más próximo, uno de los candidatos a intendente de Puerto Deseado despierta tirado en el suelo. No tiene ni un rasguño, pero su pecho está empapado en sangre y junto a él hay un cuchillo. Desesperado, se levanta y busca a su amante por toda la casa. Viajaron allí para pasar un fin de semana juntos sin tener que esconderse de los ojos del pueblo. Todavía no sabe que ya nunca volverá a verla. Ni que la sangre que le moja el pecho tampoco es de ella.

Hoy:

Nahuel ha pasado casi todos los veranos de su vida en esa casa. Por casualidad, un día encuentra una vieja carta cuyo autor anónimo confiesa haber matado a la amante del candidato. El asesino deja planteada una serie de enigmas que, de ser resueltos, prometen revelar su identidad y la ubicación del cuerpo. Entusiasmado, Nahuel comienza a descifrar las pistas pero pronto descubre que, incluso después de treinta años, hay quienes prefieren que nunca se sepa la verdad sobre uno de los misterios más intrincados de aquella inhóspita parte del mundo.

¿Qué pasó con Fabiana Orquera?

 

En los primeros meses de vida del blog, una de las primeras novelas enviadas directamente por el autor que leí fue El secreto sumergido, una historia de aventuras ambientada en la Patagonia. Me gustó mucho, me pareció entretenida y con más calidad que muchas otras (auto)publicadas en Amazon. Ya por aquel entonces Cristian Perfumo comentaba que estaba escribiendo una segunda obra, y cuando en febrero me la ofreció, me resultó imposible negarme.

De hecho, al tratarse de una novela de tipo negro subió muchos puestos en mi lista de pendientes. Total, iba sobre seguro, tanto por el género como por el estilo. Y no podéis negar que la sinopsis promete. Pero no solo eso, sino que también nos engancha con las primeras páginas y cuando te das cuenta vas por la mitad de la novela y te tienes que levantar para ir a trabajar en 4 horas… Ese tipo de cosas que me suelen pasar a mí. 

Aunque hay que reconocer que existen una serie de trucos para eso. Primero, los capítulos son muy cortos, cerrando en el punto álgido al más puro estilo page-turner. Además, combina lo que sería una investigación criminal con la resolución de enigmas y saltos temporales. Y para terminar, el ritmo es muy fluido y lleno de diálogos. Así que tiene todos los ingredientes para resultar una lectura muy ligera y entretenida para el fin de semana. 

En cuanto a los personajes, están bastante bien conseguidos y a pesar de que solo tenemos un protagonista claro (que además nos habla en primera persona) el resto no quedan difusos. Incluso tenemos la oportunidad de ir conociendo a la desaparecida Fabiana a través de los flashbacks al pasado. Que por cierto, no tienen por qué ser en forma de narración sino que también tenemos algunos extractos de periódicos, diálogos,… algo un poco diferente. 

Lo cierto es que a pesar de recurrir a personajes bastante normales (un maestro de escuela que escribe columnas en el periódico, un matrimonio rural,…) tanto sus costumbres como sus comportamientos se diferencian ligeramente de los estereotipos españoles, dándoles un aire diferente y especial.  

Eso, y por supuesto, la increíble Patagonia. Ya me había sucedido la primera vez, pero creo que si el autor ha decidido volver a ambientar su novela ahí es por algo. En cierta manera porque es un lugar que conoce bien ya que es natural de allí. Pero no es solo eso: la extensión, el silencio, lo lejano que esta de todo y a la vez lo cercano que nos parece. Hay magia en esos parajes. Y si no me creéis echadle un vistazo a las fotos que ofrece Google y luego me decís. Yo ya estoy pensando en ahorrar durante los próximos 10 años y poder permitirme un viajecito hasta allí. 

Volviendo a la historia, todo se desarrolla de forma muy ágil y sin fallos argumentales: todo encaja como un puzle al final. Un final que debería ser sorprendente para el lector. Y digo debería, porque el hecho de que no haya chirridos en el desarrollo ha hecho que yo me imaginara ciertas cosas antes de tiempo. He visto la opinión de Montse y a ella no le ha sucedido, así que si lo leéis quiero que me comentéis (sin spoilers) como habéis reaccionado al final.  

El final es cerrado, aunque ella también sugiere que el personaje principal tiene gancho y podría ser un buen candidato para una serie de novelas. Creo que eso ya es decisión del autor aunque yo creo que si Nahuel se encuentra muchos cadáveres en su camino, al final le puede pasar como a Jessica Fletcher… Nadie le invitará a las fiestas.  

En definitiva, ha sido una novela que he disfrutado mucho a pesar de no haberme sorprendido el final: está bien escrita, es ágil, engancha y te deja buen sabor de boca. En el fondo os envidio a aquellos que no hayáis leído nada antes de este autor, porque todavía os quedará otra novela por descubrir. Mientras tanto, yo tendré que sentarme a esperar.