El secreto de las cuartetas, de Pat Casalà

El secreto de las cuartetas

Pat Casalà

ISBN:    B007SVZWYI

Formato: Digital– 469 Págs

Editorial: Autopublicado

Argumento

Marta Noguera ha sido testigo del brutal asesinato de sus padres y el posterior rapto de su hija pequeña a manos de Ángel Ponsard, su marido, en la casa familiar de Calella de Palafruguell, una localidad de la costa Brava. Junto a los policías que acuden a investigar el suceso está Mick Harris, un agente del FBI que ha venido desde Estados Unidos con pruebas irrefutables de la vinculación de Ángel con Los Visionarios del Tercer Milenio, una sección invisible de Al Qaeda cuyo poder dentro de la organización terrorista es innegable. 

Estructura, ambientación y estilo narrativo

La novela se estructura en prefacio, 3 partes con un total de 47 capítulos y epílogo, todos ellos de relativamente corta extensión, numerados y sin título, a excepción de las partes que si nombran lo que va a suceder en ellas.

La historia está ambientada en Cataluña, con una incursión uncial al pasado, para incorporarse a la época actual. Las descripciones son detalladas, sobre todo de impresiones y lugares interiores como la casa o las facciones de un personaje.

Está narrado en primera persona por el personaje de Marta, con pequeños flashbacks en el texto indicados por cursivas. Abundante en diálogos y estilo fluido, lectura ágil y atrapante.

Personajes

Marta es la narradora y protagonista de la historia. Descubre ser descendiente de una larga casta de clarividentes, emparentados con Nostradamus. Se ve obligada a descubrir sus poderes a raíz de toda la desgracia que le ocurre, lo que la somete a gran presión.

Ángel, marido de Marta, es un supuesto terrorista que secuestró a la hija pequeña. Con una realidad que ocultaba a todo el mundo, resulta ser un desalmado y homicida que se hizo pasar por amante esposo y padre durante muchos años, engañando a todos los que le rodeaban.

Mick es el agente federal que viene a investigar el caso, que cae prendado de Marta desde el primer momento. Se ve frenado en su relación por la reticencia de ella a iniciar nada antes de encontrar a su hija, lo que le disgusta bastante.

Mi opinión

Empecé esta novela varias veces antes de ponerme firme a mi misma y centrarme. Supongo que me cogió en un momento malo, y volví a intentarlo cada vez para poder disfrutar bien de la lectura, que aunque sea extensa, se lee en un suspiro.

Al comenzar, el prefacio nos deja un gusanillo de querer saber más, pues nos  plantea el inicio de un don familiar: La clarividencia. Me decepcionó un poco el cambio de ambientación, pues me gustaba la inicial, aunque rápidamente me acostumbré a la nueva situación y me picó la curiosidad. Nos encontramos frente a una situación límite, en la que Marta ha visto cómo su marido, del que no sospechaba nada extraño, mata a sus padres y se lleva a su hija. Y además llega un inspector del FBI y le dice que es un sospechoso terrorista.

Con ese inicio es imposible no engancharse, querer saber más de todo. Lo malo es que Marta (que evidentemente es descendiente de la misma Marta de varios siglos atrás) descubre su don y lo asume de una manera un tanto precipitada.

Quizá no tiene mayor importancia porque nos quedan muchas cosas por delante, y los dos primeros capítulos te ponen en antecedentes del pasado (a modo de conversación) para luego dar lugar a toda la historia. Hacerlo de otra manera más pausada hubiera alargado al menos 100 páginas, una novela ya de por sí extensa.

Era la segunda vez en un mes que me encuentro con Nostradamus en la lectura, aunque en este caso no como en El espejo de Nostradamus. Nos encontramos con el profeta clásico y sus cuartetas, dándole un origen concreto de acorde a la historia, que por cierto, le sienta muy bien.

Nos intercala las cuartetas de Nostradamus, adaptando sus significados al contexto de la historia. El trabajo de documentación ha sido muy bueno, y también la creatividad que requiere enlazar algo ya escrito con una nueva historia. Por supuesto, siempre va el original acompañado de una traducción.

También es interesante la forma en la que relaciona los atentados terroristas y catástrofes naturales de los últimos años, para darles un contexto en la novela, cambiando las motivaciones y realidades de cada uno de ellos.

Para mi gusto, los diálogos son un poco forzados y no me dieron sensación de naturalidad, como con verbos y frases que quedan bien en el lenguaje escrito, pero en el hablado chirrían. Yo hubiera sustituido algunos de ellos por explicaciones de la conversación más que por guiones.

Que conste que no soy muy amiga de las novelas narradas en primera persona. Si que es cierto, que resulta más cómodo escribirlo así para el autor, porque le pueden conferir parte de tu personalidad y tus experiencias. Pero por otro lado esto impide desarrollar el resto de personajes.   

Evidentemente los personajes solo los vemos perfilados por las observaciones de Marta y por los diálogos. No vemos que hacen los demás a sus espaldas, que opinan o que sienten. A algunos les sienta mejor, y a otros peor, aunque por lo general no está del todo mal ya que la novela es muy extensa y da tiempo a conocerlos a todos bastante en profundidad, aunque siempre desde un punto de vista concreto.

Por mi parte, creo que es una novela a la que le vendría bien algunas pequeñas correcciones, e incluso separarla en volúmenes, ya que hay cosas que suceden muy precipitadamente y no da tiempo a asimilar. Tengo entendido que podría haber una segunda parte (o que la hay ya escrita)

Saliendo del tema técnico, que no quiero parecer que me estoy cebando, la historia me ha gustado, es muy entretenida casi en todo momento, porque pasan muchas cosas y muy rápido. Hay relación amorosa, como no podía falta en la mayoría de las novelas, y tampoco es demasiado pastel.

De hecho, el tema romántico me parece bastante realista por parte de Marta, que se niega a saber nada de ningún hombre (por mucho que se sienta atraída por él) hasta que no recupere a su hija. ¡Lógico! Más irracional me parece Mick, que se toma muy a la tremenda su negativa, llegando a hacer verdaderas bobadas. Sinceramente, nunca entenderé a los hombres…

Ha habido personajes que me han caído mal. No que sean malos, o que estén mal concebidos, sino que me generaron rechazo, como los hermanos de Marta. Por la personalidad que les da, un tanto egoístas para mi gusto y controladores de todo, no me hubiera gustado que fueran mis hermanos en la vida real.

El final resulta igual de trepidante que el resto de la novela, con un final predecible a medias. Llegados a ese punto, algo así nos imaginábamos que iba a pasar aunque eso no resta interés a lo que cuenta.

La historia incluso podría estar ser adecuada para llevarla al cine, con efectos especiales de los potentes, con mucha acción. Más que recomendable para aquellos a los que les gusten especialmente los best sellers, las historias trepidantes de aventuras o similares.